1356/24: DE INVERSIONES PRODUCTIVAS (Co-Autoría con LEWANDOWSKI Y OTROS)
Las microempresas y las pequeñas y medianas empresas (pymes) representan más de dos tercios del empleo global, según la Organización Internacional de Trabajo. En Argentina, en junio de 2023, las pymes constituían el 99,4% del total de empresas, habiendo creado 140.000 empleos en el primer trimestre de ese año en comparación con el mismo período de 2022. No obstante, desde diciembre de 2023, estos indicadores han mostrado un descenso preocupante.
La caída en la actividad de las pymes ha afectado el empleo, con una pérdida de 40.000 empleos entre enero y mayo de 2024, de un total de 92.000 empleos perdidos en el sector privado registrado. Si la recesión continúa, la pérdida podría ascender a 87.000 puestos, según el Observatorio de Industriales Pymes Argentinas (IPA).
En respuesta a esta situación, el gobierno ha implementado un Régimen de Promoción de Grandes Inversiones (RIGI), que favorece a las grandes empresas extranjeras, dejando de lado a las pymes. Esto ha generado preocupación, ya que estas empresas son cruciales para la economía nacional y la creación de empleo.
Ante este panorama, se propone un proyecto que busca fomentar el desarrollo y la competitividad de las pymes mediante incentivos fiscales y financieros. Estos incluirían beneficios como bonos fiscales, amortización acelerada en el Impuesto a las Ganancias, y facilidades en la exportación, con el objetivo de apoyar su crecimiento y capacidad para competir frente a grandes conglomerados empresariales.
